jueves, 29 de diciembre de 2011

Los animales de Carmen y Chio

¡Hola a todos!

Voy a escribir una nueva entrada en este blog. Os voy a hablar sobre varias anécdotas que he vivido con los animales de Carmen, pues como ya habeis comprobado, este blog habla sobre ellos.

De la primera de la que os quiero hablar es sobre Zara. Ella es una perra peculiar. Parece pequeña, pero tiene un carácter… A la pobre le ha pasado de todo en este año que le he conocido.

La anécdota que os quiero contar empieza así: Zara estaba malita y le habían puesto un collarín. Fui a ver a Carmen y así aprovechaba y le hacia una visitilla a Zara para ver como se encontraba. Cuando la vi pensé “Parece un embudo”. Ella estaba subida en la cama, mientras que yo estaba sentada en el suelo, como de costumbre. Tenía hambre y yo tenía cosas para comer y le fui a dar una. Al saltar de la cama y coger el trozo de jamón que tenía se le quedó la cabeza con el collarín enganchado en el suelo. No podía levantar la cabeza. Fue muy gracioso. No me había reído más en mi vida.

Del segundo del que os quiero hablar es de Charly. Es el perro ideal y es el más cariñoso que he conocido en toda mi vida. Lo amo ja, ja, ja.

Lo que os quiero contar de el es su manera de retorcerse cada vez que quiere que le hagas caso. No he visto nada parecido. Primero se tumba boca arriba en el suelo. Luego se retuerce tanto que su cuerpo toma forma de “S”. Algo poco creíble pero os puedo asegurar que es cierto. Pero no contento con eso, levanta sus cuatro patas. Es algo sorprendente y a la vez graciosísimo.

Del último del que os quiero hablar será de Harry. No es exactamente de Carmen pero es de su hermana Pilar y lo consideran parte de la familia. No lo conozco mucho, pero conviví con él un fin de semana.

La anécdota que os puedo contar de él es que cuando estábamos cuidándole el fin de semana que yo pase con él y con Carmen en Segovia fuimos a dar un paseo con él. Nos metió sin querer por uno de los caminos más complicados y que acababa en una barriada en la que nosotras, por lo que se veía, no teníamos nada que ver. Nos asustamos un poco pero todo se quedó en eso. Menos mal, ahora lo pienso y me rio.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Animales actuales de Nayi

Aquí os cuelgo un vídeo en el que aparecen Chiqui, Betty y Miguelito, sobre todo Miguelito.

Espero que os guste, la verdad es que Miguelito es súper gracioso.

Por cierto, no arañó el móvil cuando lo mordió, jajaja.


¡¡ EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

jueves, 15 de diciembre de 2011

Betty

Ayy Betty...

Betty es la princesita de la casa de Nayi. Igual que lo es Zara en la mía.
Es otro maltés, pero de un tamaño considerablemente más pequeña que Chiqui. ADORA a Chiqui, pero como todos los cachorros se pasa el día mordiéndole las orejas e intentándose subir encima de él.

Es un terremoto y una ricura a la vez. Algo que hemos descubierto hace poco es que es una perra que posa y mira a la cámara. Increíble.
Cuando era más pequeña (aún) se dedicaba a intentar mordernos a todos la nariz o lo que pillara.
  
Me recuerda muchísimo a Zara, ambas están medio locuelas, hacen exactamente lo mismo, se dedican a ladrar a perros más grandes que ellas como si ellas fueran gran cosa...
Hace poco se hizo daño en una patita por caer mal desde un sitio alto. Y es que los perros no deberían estar saltando de un lado para otro como les dejamos hacer. Es otra cosa que tiene en común con mi perra, son unas saltimbanquis. 

Bueno, no se que más decir, no he vivido muchas experiencias con ella, pero ¿qué se puede decir precisamente de un cachorro? Son todo risas y juegos, así que con lo que mola podéis imaginaros como pasamos el tiempo cuando estamos con ella ;)


¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

viernes, 9 de diciembre de 2011

Chiqui

Chiqui es el perro de mi amiga Nayi. Es un maltés, pero es más grande que el resto de los de su raza. Es un perro súper bueno, que deja que le hagan de todo. Le conozco desde...siempre. Sin embargo, solo hasta este verano que he estado en su casa practicamente todos los fines de semana, me ha estado gruñendo cada vez que llegaba a la casa. Si no hubiera tenido perros habría tenido miedo jajaja. 

Recuerdo la primera vez que le vi. Aún no era amiga de Nayi, pero sabía que era de mi clase. Siendo una bola de pelo enana, lo llevaron al colegio donde estudiaban juntos nuestros hermanos. Y ella estaba jugando con Chiqui corriendo de un lado para otro. Bueno, yo era (y sigo siendo) la típica que se iba detrás de todos los perros que veía, y claro, era un cachorrito. No recuerdo si al final fui a jugar con ellos o no, pero sí que me moría por ir.
Recuerdo también muchísimas veces en las que hemos creído que Chiqui se había perdido porque se separaba de la persona que lo estuviera paseando. Y resulta que cuando se cansaba de pasear, en vez de quedarse quieto para que el dueño le mirara y viera que lo que quería era irse a casa, cogía y se iba el solo a casa. Total, que cuando ya la gente se repartía los lugares por los que buscar al perro, aparecía caminando tranquilamente por la plaza. Es un perro GPS que se conoce todo Rivas por lo que parece, jajaja.

La verdad es que le conozco desde hace tanto tiempo... En fín, entra en el grupo de "mis animalitos" jajaja, me encantan, no se si se nota. 


¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

jueves, 1 de diciembre de 2011

Miguelito

Como dije, aquí también voy a hablaros de las mascotas de amig@s mi@s, así que hoy toca hablar de Miguelito, quien pertenece a Nayi.

Nayi es mi mejor amiga desde los 10 años, y casualmente ambas tenemos como mascotas dos perros y un roedor (más sus tortugas) Entendéis por qué empiezo a hablar de sus mascotas, ¿eeh?

Miguelito es su adquisición más reciente, pero como es la foto que ántes he encontrado, va a ser el primero en aparecer.

Como ya os he dicho, Miguelito es un roedor... pero todavía no sabéis cuál... Es una... ¡ARDILLA!
Y una ardilla curiosa y con sus cosas, jajaja. En lo primero que te fijas es en que es una ardilla BLANCA, si, blanca...amarillenta. Aunque estamos descubriendo que según la estación cambia de color, pero como el tiempo está así de loco no hemos podido determinar cuándo se supone que es, ya que en este otoño comenzó a ponerse rojiza y ya vuelve a ser blanca... jajaja.

Otra cosa en la que te fijas, y no porque vayas fijandote normalmente en eso, ¡ojo! ¡Es simplemente por el contraste! es en... pues eso, que es macho, jajaja. En fin, que voy a decir, siento que sea lo segundo en la lista, pero es lo que más se ve. Negros...y del tamaño no hablo jajaja.

Tiene también unos ojillos negros grandotes y muy brillantes. Cuando está metido en su casita y se asoma, lo único que alcanzas a ver es su brillo. 

Es muy majete, tiene una lengua picuda larga, larga que saca cuando pones el dedo lo suficientemente lejos como para que no pueda olerlo. Cuando la perrita se acerca a la jaula él se acerca y se lamen. Es total jajaja. 




Más adelante subiré un vídeo. La verdad es que es muy divertido.

¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

martes, 22 de noviembre de 2011

Mis mascotas =)

Aquí os dejo un vídeo en el que aparecen mis tres mascotas actuales. No es gran cosa pero salen graciosos =)





¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Pelusa y Zara

Desde el principio procuré que Zara viera a Pelusa como una posible compañera de juegos, y no como algo de comer, como hacía Rocky. 

Os adjunto un vídeo casero de uno de sus primeros encuentros =)  Confieso que no está muy allá jajaja.




¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

sábado, 12 de noviembre de 2011

Charlie 2

Lo encontraron un sábado por la mañana. Por la tarde mi madre y mi tía fueron a hacer un recado, y a la vuelta vieron como el perrito caminaba por el pequeño arcén de la carretera. ¡Se había escapado! Pero no podían parar ahí para recogerlo, así que se fueron a casa. Una amiga de mi tía la llamó por la noche para decirle que habían encontrado al perro en la playa y que se lo habían llevado a la casa en la que estaban por si querían ir a recogerlo. Eran las doce de la noche, pero mi madre y mi tía se vistieron y fueron a por él. 

Se portaba bien en todo momento, cuando le dejaron durmiendo en un cuartito, él se quedó tranquilo, sin ladrar ni molestar. Al día siguiente lo trajeron a Madrid. Hecho una bolita entre las maletas y las plantas que traían. No dijo ni "mu" en todo el camino. Cuando llegaron, me lo enseñó mi madre súper contenta, alabando a la "perrita". "¿Estás segura de que es hembra?" le dije a mi madre. Levanté una de sus patas traseras y lo comprobé "Mamá, es macho", "Ah, esque tiene esa carita tan guapa, que parece hembra...". ( Ayyy...)

El primer encuentro con Zara fue un poco tenso. Zara estaba deprimida por lo de Rocky y, además, por copia y pega de Rocky, no era sociable con los demás perros. Le atacó varias veces, Charlie estaba acoj... muerto de miedo .¡Zara estaba hecha toda una malota! En fin, costó un poco, pero ahora... Son inseparables =)

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Charlie

La llegada de Charlie... Llegó tras uno de los hechos más tristes de toda mi vida... La muerte de Rocky... 
Un pequeño espacio dedicado a Rocky




El terrible suceso ocurrió estando mi madre lejos de casa. En la finca de Galicia. Al día siguiente, estando ella trajinando por allí, se metió en una de las casetas donde guardamos cosas para el cuidado de las plantas sin fijarse en que habían dejado la puerta abierta. De reojo vio dos ojos que la miraban, y mi madre, asustada porque no sabía lo que era (creía que era una rata gigante, ya sabeis, el campo...) gritó y salió de la caseta, seguida de...Charlie. Cuando vio que solo era un perro de mediano tamaño que salió asustadísimo por el grito de mi madre le persiguió. Rodearon toda la casa, el perro se dirigía a la salida de la finca. Mi madre y mi tía se juntaron y empezaron a llamarlo "Ven perrito, perritoo..." . El perró las miró y al final se dirigió hacia ellas y dejó que lo tocaran. 

Desde ese momento no se separó ni de mi madre ni de mi tía. Nos llamaron para decirnos que habían encontrado un perrito y que habían estado preguntando en las casas de alrededor para ver si era de alguien, pero nadie lo reclamó como suyo. Por lo tanto decidieron quedárselo esa noche.





¡EL PRÓXIMO DÍA MÁS!

miércoles, 26 de octubre de 2011

PELUSA 2

Voy a contaros cómo perdió Pelusa su tupé...

Como ya os dije, Rocky le tenía un poco de envidia a Pelusa, y... ganas de comérsela y esas cosas ja, ja, ja. Siempre que Rocky se acercaba a su jaula se ponía a ladrarla, ¡y la tonta de Pelusa se asomaba para verle! Yo tenía miedo de que un día Le pillara una orejita y se la desgarrara, porque ya os digo, era tonta. 

Todos los años había que tener muchísimo cuidado para que Rocky no andara suelto cuando soltábamos a la coneja con su correa por la finca. Al menos yo quería seguir manteniéndola con vida.

Un día en casa, después de oir ladrar al pesado de Rocky un rato, vino al salón... con un mechón de pelo blanco en la boca. Corrí a ver a la coneja. Estaba metida en su casita. La saqué y comprobé si estaba bien. ¡Oh! Ya no tenía su gracioso tupé. Algo tenía que pasar. ¡No debió acercarse a Rocky cuando éste la ladraba...!




 


¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!

jueves, 20 de octubre de 2011

PELUSA

No tengo ni idea de que estaréis pensando al leer este título. Pelusa es el nombre de mi coneja. Sí, tengo, además de dos perros, un conejo. 

Llegó antes que Zara. Su llegada fue, pues extraña, ja, ja, ja. Un día en que me levanté más pronto que mi hermana, se despertó, y me dijo "¿Has visto mi conejo?", a lo que yo, pensando que me lo estaba diciendo sonámbula le dije, "Nooo... duérmete". Horas más tarde, cuándo se levantó, volvió a repetirme, "¿Has visto mi conejo?" a lo que, un poco alucinada le dije "¿Pero lo estás diciendo en serio? ¡Creí que estabas soñando!", "No, ¡Está en la terraza!".

Me dirigí hacia la terraza. Efectivamente, había una caja de cartón en ella. Al abrirla, un conejito blanco se encontraba acurrucado en una esquina. ADORABLE. Al cogerlo en brazos aprecié mejor el tupé que tenía y los ojillos azules que miraban nerviosos todo aquello que podía ver. 

Su primer nombre era Elvis, por el tupé. Pero después en el veterinario me dijeron que era hembra, así que como Rocky la tenía envidia (Cuando alguien tiene envidia se suele decir que tiene pelusilla) y tenía tanto pelo, decidimos llamarla Pelusa.





¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!

jueves, 13 de octubre de 2011

Zara

Cómo ya os dije en la entrada anterior, esta loca llegó a mi casa gracias a mi hermano mayor.

Es muy cariñosa, divertida y te lo pasas genial con ella, pero, madre mía, la de faenas que ha hecho... Voy a ir contándoos algunas según me vengan a la cabeza.

1. Ésta no es una faena en sí, pero resultaba un poco molesto, je, je. Cuándo era "bebé", cada dos horas había que levantarse a hacerle el biberón y dárselo. Recuerdo que la primera noche, mi hermana mayor y yo acordamos que nos turnaríamos para dárselo; a las dos horas se levantaría una y la otra seguiría durmiendo, a las siguientes dos horas se levantaría la otra... y así podríamos dormir unas cuatro horas seguidas. Pues bien, nos levantamos las dos cada dos horas al final. Fue una noche espantosa, aunque, mejor dicho, espantoso fue afrontar sin haber dormido el dia siguiente. Eso sin contar que la pequeñina nos despertaba ántes porque se ponía a llorar... 
Y eso no era todo. Apenas se tomaba el biberón y al final tuve que ir al veterinario al dia siguiente para que me aconsejaran algo, ya que yo nunca había tenido una mascota desde tan temprana edad. Era Noviembre y hacía frío. Tuve que llevarla dentro de un gorro de lana que a su vez estaba envuelto en una bufanda. Causó sensación en el veterinario cuando se despertó y salió de aquel barullo bostezando. Os adjunto una fotografía =) . 


 
 

2. Cuándo empezaron a salirle los dientes... podéis imaginaros... lo que seguro que no os imagináis, es que, aparte de comerse casi todas nuestras chanclas de playa, que utilizábamos de andar por casa (para que os hagáis una idea, por aquel entonces éramos siete en casa, por dos pies que tenemos todos... [gracias a Dios] ), se comió también una esquina de un mueble de madera que tenemos en la entrada de casa, y, ¡madre mía! el dia que seguí unas huellecitas blancas hasta la terraza... ví muchísimo polvito (yeso) blanco en el suelo... y descubrí de dónde había salido... ¡Era la esquina de la pared!  Actualmente sigue así, porque, ¿qué hacemos con ella? Se ha quedado de recuerdo ¡ja, ja, ja! Ya adjuntaré una foto, ahora mismo no tengo ninguna.

3. Bueno... esta ya... ¡sí que es una faena! Veréis, a mi madre le gusta mucho la jardinería, y por supuesto tiene los típicos productos guardados en un armarito en la terraza para el cuidado de las plantas, tales como... el fungicida. En fin... ¡Es que no puedo no reirme al acordarme de esto! En aquel momento se pasa mal y esas cosas, pero es lo típico, que despues te acuerdas y te partes de risa. El caso es, que una agradable tarde de no-sé-que mes... mi madre empezó a gritar y entre los gritos oía mi nombre y el de Zara, total, que fuí a ver que pasaba, porque oía  mi nombre. Llego a la terraza, y veo todo el suelo lleno de polvo verde, el polvo verde lleno de huellitas, mi madre con el sobrecito de fungicida destrozado en una mano y a Zara en su otra mano... Pero Zara... tenía todas las partes blancas de su cuerpo...verdes... Es decir, patas verdes y boca verdes... Lo que mi madre gritaba era " ¡Carmen, llévate a Zara al veterinario a que le hagan un lavado de estómago que se ha comido el fungicida!" . Siempre es Carmen la que lleva a los animales al veterinario, así que Carmen llevó a la perra al veterinario. Bueno, mi entrada fue espectacular, porque según iba hacia el veterinario Zara empezó a vomitar, y yo cada vez iba más alarmada. Mi entrada fue, abrir la puerta ir rápido hacia el mostrador y decir "¡Mi perra se ha comido un fungicida!" con voz alarmada, que no gritando. Se quedaron atónitas y me preguntaron que si sabía cuál era. Mi madre, previsora, me había dado lo que quedaba del sobre/paquete. En fin, no se cuantas horas estuve allí. Al final se quedó ingresada y yo era la única que iba a visitarla todos los días. Pobrecita. Os pongo dos fotos de ese día. 




Ya os seguiré poniendo faenas de esta locuela. Os voy a dejar aquí la evolución física de Zara que os mencioné en la anterior entrada. He considerado las dos primeras fotografías como 1ª evolución, así, como si de Pokémon habláramos ¡ja, ja, ja!

(No puedo poner la imágen más grande, ¡lo siento!)



¡EL PRÓXIMO DÍA MÁS!

miércoles, 5 de octubre de 2011

Rocky... y Zara

Sé que es el nombre de esa famosa tienda el segundo que ocupa el título de este blog, pero no me refiero a ella, me refiero a mi segundo perro, más bien perra. 

Mi madre siempre decía que jamás tendría más perros, pero no supo decir que no a mi hermano cuándo éste le dijo que la perra de un amigo suyo iba a  tener cachorros y que se iba a quedar con uno. Obviamente, no esperaba que la perra acabara siendo nuestra, ya que al final no se la llevó a su casa. Pero no me apena, es super divertida, cariñosa y está medio loca.

Como podréis imaginaros, nuestro mayor miedo era que Rocky no la aceptara. Para facilitar las cosas eligió una hembra para evitar futuras rivalidades. Pero el muy graciosillo eligió a la que más se movía (así salió luego, ja, ja, ja). 



El esperado día llegó. Mi hermano le había comprado ya su mantita, el trasportín, que sería su "casa" hasta que creciera, los juguetes, el reloj de "tic-tac" (a los cachorritos, cuando se les separa pronto de la madre es mejor ponerles uno de estos relojes para que crean que es el latido de un corazon, supuestamente el de la madre), la leche en polvo para perros, el biberón.... En fin, todo lo necesario para un cachorrito de tres semanas. 



 ¡Era una ricura! y tiene algo particular, y es que a lo largo de su vida ha parecido cuatro perros diferentes: al principio era una adorable perrita marrón chocolate con calcetines blancos y pecho y punta del rabo blancos, el pelo le creció, parecía una fregona de los mismos colores, llegó el verano...y la rapamos ¡OH! ¿Dónde está Zara? Nos devolvieron una perra delgadita y...¡¡dorada!! (casi blanca) ¡Qué vergüenza pasó! La pobre no salía de debajo de la rinconera. y su actual, y definitivo look, es ese mismo color pero "medio-largo".

Aún recuerdo cuando Zara, aún tropezando al caminar, cada vez que veía a Rocky salía "corriendo" hacia él. Por supuesto, nosotros al principio teníamos miedo de que Rocky la hiciera algo, y nunca dejábamos que le "atacara" así.  

Al ser tan chiquitilla, había que estar pendiente de ella, jugar, hacerla correr... y el pobre Rocky siempre andaba asomándose para ver que hacíamos. Puede parecer que con esto acabara odiándola. Es cierto que la tenía un poco de tirria, pero razones no le faltaban; le quitaba los juguetes, comía de su comedero, mi recuerdo favorito de trastadas: ver a Rocky desde el salón atravesar el pasillo con Zara arrastrando intentando tirar de su rabo en dirección contraria.  Sin embargo, Rocky siempre quiso a Zara, jamás como una posible "compañera", más bien como una hermana pequeña. Era una relación muy dulce. De hecho Zara copió la manía de Rocky de ladrar a todos los perros que se encontraba y creo que la adoptó porque, obviamente, con el perrazo que tenía al lado, no le iba a pasar nada, y no pasaba, ya que cuando algún perrillo se acercaba simplemente a oler a Zara, Rocky parecía que se lo iba a comer porque se acercaba a "su" Zara.

No sé si se nota, pero me encantan mis perros.. ;)

¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

viernes, 30 de septiembre de 2011

Rocky, segunda parte

Una vez en casa, como podéis imaginaros, no parábamos de perseguir al perro por todas partes. La emoción de tener un perro nos hacía querer estar con él todo el rato.

Mi familia quería llamarle Roco, pero, como supuestamente el perro iba a ser el regalo de mi comunión, que era un mes más tarde, y no me gustaba en absoluto ese nombre, me dediqué a llamarle en todo momento Rocky. Recuerdo a mi hermana regañándome "¡Tú! ¡Te has dedicado a llamarle Rocky y ahora solo contesta por ese nombre!" mi sonrisa de satisfacción no fue la mejor respuesta... 
Mi madre los primeros días tenía miedo de que se "comiera" a alguno de sus hijos, y lo dejaba dormir en la terraza. CRASO ERROR. ¡Se cargó la persiana! (varias veces) y finalmente decidió...atarlo a la puerta de la entrada con la comba de mi hermana.

Recuerdo la primera vez que le ví limpiándose... Al no haber tenido jamás un perro, no tenía ni idea de que era así como se limpiaban. Le apartaba la cabeza diciendo "Noo, noo. ¿Tú ves que alguno de nosotros haga eso?"
Cuando lo llevamos por primera vez a la finca de Galicia, descubrimos que había heredado la manía de su madre: ESCARBAR. Llenó en un santiamén la finca de surcos y agujeros. Y no solo aquella vez, si no el resto de su vida. Fue una manía que jamás pudimos quitarle. Actualmente forma parte del paisaje ¡Pero todo tiene un lado positivo! Hacia el fondo de la finca es donde están las casetas con la madera y algunas herramientas, juguetes y tablas de bodyboard. Por lo tanto, lo que hacía, aparte de ser un larguísimo surco finca abajo, era un camino para llegar a través de las altas hierbas.

Cuando nos íbamos a la playa, le dejábamos haciendo compañia a mi abuelo. Se querían mucho, ya que pasaban mucho tiempo juntos, y vivían situaciones graciosas. Como por ejemplo, una vez que mi abuelo estaba subiendo una madera muy grande y la llevaba arrastrando finca arriba, mi perro se quedó mirándole y, sin darse mi abuelo cuenta de cuándo fue por detrás suyo, Rocky cogió la parte que arrastraba y le ayudó a llevarla hastala explanada que hay enfrente de la casa. Mi abuelo no daba crédito y nos lo contó entre risas.


                      Rocky en la finca de Galicia


Recuerdo también una vez, que nos habíamos encontrado un gorrión que aún no sabía volar. Le teníamos mucho cariño. Es lo que pasa cuando consigues que una criaturita no muera, que le tomas mucho cariño. Siempre teníamos cuidado de que "puxi" no estuviera suelto cuando Rocky andaba suelto, ya que no sabíamos cómo actuaría con él. Teníamos una ligera sospecha, ya que siempre intentaba comerse a los periquitos... Un día, enseñándole a volar de uno a otro, Puxi echó a volar en direción a Rocky, que estaba plácidamente tumbado en una explanada de pizarras. Observamos aterrorizados como el pajarito aterrizaba en la cabeza de Rocky, y al no poder agarrarse, rodaba por su cabeza, hocico y finalmente cuando Rocky levantó la cabeza, caía entre sus patas. "Se lo come" pensamos", pero Rocky jamás haría daño a otro "ser", por así decirlo, que nosotros quisiéramos. Lo olió y lo lamió sin hacerle nada para sorpresa de todos.

¡¡EL PRÓXIMO DIA MÁS!!

jueves, 29 de septiembre de 2011

EN ESTE BLOG....

... hablo de mascotas, propias y de amig@s!! Espero que os entretenga =)


Soy Carmen, estudiante de Información y Documentación.

En esta primera entrada, no puedo hablaros de mi primera mascota, ya que no recuerdo cual fue... ¿Tortugas? ¿Peces? ¿Hámsters? ¿Jerbos? ...Así que os hablaré de la primera mascota a la que realmente he querido y considerado parte activa de mi familia: Mi primer perro, Rocky, quien desgraciadamente falleció en agosto de 2010.

Rocky era un Pastor Alemán de raza nacido en Valencia. Lo trajeron a Madrid, concretamente al Centro Canino Gufy, en el pardo, donde se dedican también a la cría de Pastores Alemanes. El padre de Rocky era "modelo" y su madre participaba en campeonatos.

La historia de cómo acabó con nosotros, comenzó unos meses atrás, cuando se me metió entre ceja y ceja que quería un perro. Tras convencer a mis cinco hermanos, solo faltaba hacerlo con mis padres. Nunca olvidaré ese momento en la habitación de mi madre, todos de rodillas pidiéndoselo por favor, y mi madre al teléfono con mi padre. Afortunadamente ¡Aceptaron! Pero no nos iban a comprar el Cocker negro que creíamos que tendríamos. Mi tío les había informado de un lugar donde podríamos conseguir un perro que nos defendiera, y si había suerte, gratis.

Cuando fuimos a recogerlo, la primera impresión que tuve, con mis 8 años, fue que era ENORME, aunque solo tenia 7 meses. Ahora, cuando veo un cachorro de Pastor Alemán de esa edad, lo comparo con el tamaño de mi perro y me parece pequeñísimo. Pero claro, yo también era pequeña. Me gusta pensar que hemos crecido juntos.

Conseguimos a Rocky gratis, ya que a esa edad nadie lo compraría, y como tenía el rabo más largo de lo normal y las orejas más grandes también, la policía no lo cogería. Mi tío se quedó con su hermana, y la llamó Neka. Ese día estuvimos jugando con ellos y al finalizar la tarde, metimos a Rocky en el maletero de la furgoneta y nos fuimos a casa....ya era nuestro. =)

¡¡EL PRÓXIMO DÍA MÁS!!